Escrito por M.Sc. Alberto E. Rojas Vásquez *
Introducción
“…es importante tomar en cuenta lo que la gente común y corriente piensa; porque todo hablante es un experto en su lengua, aunque no lo sepa; …” Carla Victoria Jara Murillo, 2006.
El idioma español que se habla en Costa Rica ha sido objeto de diversos estudios lingüísticos, primordialmente porque en su evolución se articulan distintas raíces idiomáticas y fonéticas procedentes de provincialismos así como de la jerga marina y el léxico popular español desde antes del siglo XVI. A su vez, con el proceso de conquista y colonización del continente americano que se origina en el siglo XVI, se enriquece con diversas expresiones verbales procedentes de las lenguas nativas (indígenas), así como otras de origen europeo y extraeuropea como los galicismos, africanismos y más delante los anglicismos.
Los principales rasgos lingüísticos peninsulares que se esparcieron en las colonias hispanas provenían de las regiones de Castilla, Andalucía y Sevilla. Esta última, de acuerdo con Sánchez Lobato (1994, p.560) fue la ciudad peninsular más importante de España, debido al privilegio de ser puerto de entrada y salida hacia los territorios americanos. Para ciertos sectores de la población española, ven en los territorios extranjeros un camino para hacer fortuna y lograr aventuras, de ahí es que se divulgan las peculiaridades lingüísticas sevillanas en el continente americano. Por otra parte “Las variedades andaluzas en plena ebullición les impregnarán en su etapa sevillana y los acompañarán en su andadura americana. «Los rasgos característicos de la lengua en Andalucía dominaron el proceso, pero en él estuvieron presentes peculiaridades de todos y cada uno de los otros dialectos peninsulares, en mayor o menor grado” (Sánchez Lobato, 1994, p. 560)
De este modo, la imposición de la lengua hispana como resultado del contacto cultural europeo sufre distintos grados de criollización, lo que a la postre modificó el léxico español trasplantado en América. Por lo tanto,
En el español que trajeron los colonos y conquistadores al Nuevo Mundo había voces populares de marina, provincialismos, etc., muchas de las cuales se han conservado aquí tanto en España, y al vocabulario fundamental y común así constituido, con aportes de todas partes de la Península, fueron incorporándose más palabras y modificándose el significado de otras y existentes: voces de marina con otros significados, nombres de plantas, animales y cosas europeas dados a plantas, animales y cosas de América, etc., (Agüero Chaves,1996,p. XI)
De acuerdo con lo anterior, la lengua castellana procedente de la península Ibérica difundida en Costa Rica va de la mano con el proceso colonizador que desembocó en la fundación de pueblos y la aculturación de los habitantes. Esta se divulga primeramente por los conquistadores, como Juan de Cavallón en 1561 y Juan Vásquez de Coronado en 1565, entre otros. No obstante, de acuerdo los autores Agüero Chaves (1996, p. IX-XIII) y Sánchez Corrales ( 1988: p. 147-156) se le incorporan gran cantidad de palabras procedentes de voces indígenas castellanizadas ( expresiones mejicanas, antillanos o suramericanas), que con el paso del tiempo la semántica permitirá su adaptación y uso cotidiano.
No obstante, para Sánchez Lobato (1994) “…la gran variedad y diversidad léxica del español en América frente al español peninsular se encuentra en su propia orografía y en sus hábitos culturales, aunque reconozcamos, asimismo, su no uniformidad entre los diferentes pueblos de Hispanoamérica. Si bien es cierto que los españoles que llegaban a América poseían sus referencias espacio-temporales y las denominaciones de la fauna y flora que les eran próximas, hemos de constatar que la realidad visualizada en América, sin contar con el enorme caudal léxico suministrado por las lenguas indígenas: hamaca, barbacoa, piragua, alpaca, cancha, piraña, mandioca, etc., debió imponérseles para encontrar el léxico apropiado que marcara un poco sus referencias, al ser tan diferente el paisaje, la fauna, la flora y las relaciones humanas a las dejadas en su rincón de origen peninsular.” (p.p. 563-564)
De texto anterior se deduce que el idioma español importado evoluciona en su fonética, gramática y semántica, tanto para los sectores cultos ( formal) ubicados en las ciudades como para los habitantes de pueblos y villas ( informal). Es un proceso de apropiación idiomático o préstamos lingüísticos que subyace en el quehacer cotidiano, dando como resultado unidades fraseológicas y vocablos propios con una connotación particular y variedad de significados según sea la región.
Por otra parte, el avance del español hablado en el caso de Costa Rica incorporó sistemáticamente una serie de palabras y usos propios del lenguaje, que ha sido denominados costarriqueñismos. Estas particularidades en las formas de tratamiento, usos, folclore y costumbres del lenguaje a través de los años, han sido divulgados por distintos escritores e investigadores como Carlos Gagini, Aquileo J. Echeverría, Joaquín García Monge, Carlos Salazar Herrera, Miguel Ángel Quesada Pacheco, Arturo Agüero Chaves, Giselle Chang Vargas, Carla Victoria Jara Murillo, Mario Hernández Delgado, Manuel González Zeledón (Magón), Elías Zeledón Cartín, Luis Ferrero, Fabián Dobles, Carlos Luis Fallas, Giebler Simonet y Constantino Láscaris Comneno, entre otros; y corresponden a un acercamiento al legado del patrimonio cultural inmaterial costarricense, puesto que, a través de sus obras enfatizan entre otras cosas los diversos aspectos lexicográficos y de habla formal e informal (popular).
Desde la posición de Agüero Chaves (1996) esto implicaría que “…el español de Costa Rica, lo mismo que el de los otros países de Hispanoamérica, tenga voces anticuadas (algunas desaparecidas en España o convertidas en vulgarismos), populares, regionales, campesinas, de marinas, etc.”. ( p.XI ) . Esto significa que es el resultado de una evolución lingüística concomitante con el diario vivir del pueblo costarricense, que sin cuestionar el pronunciamiento lo aceptó como correcto y lo hizo propio.
Adicionalmente el español que se habla en Costa Rica, de acuerdo con Agüero Chaves(2007), citado por el Instituto de Investigaciones Lingüísticas de la UCR, se ha dividido en dos grandes zonas dialectales, la del Valle Central y la de Guanacaste, pero diferentes zonas más pequeñas que poseen doce rasgos lingüísticos, organizados en cinco grandes regiones:
· Valle Central
· Zona Noroeste (Guanacaste, península de Nicoya)
· Zona Atlántica (provincia de Limón)
· Zona Norte (San Carlos, Ciudad Quesada)
· Zona Sur (Pérez Zeledón y parte de Puntarenas)
Sin profundizar en cada una de las anteriores, la evolución de los aspectos lingüísticos involucró diferencias regionales en el léxico costarricense, como: yeísmo y seísmo, fricativas ( sonidos de los órganos bucales), sonidos nasales, “erre tica”, fonología ( cambios de acentos, de vocales y sonidos finales), voseo, ustedeo y tuteo.
En síntesis, un sinnúmero de expresiones verbales de uso cotidiano autóctono e importado, se arraigaron en sus habitantes de todas clases: desde la alta alcurnia del poder civil y eclesiástica hasta las voces propias del quehacer citadino como el mercader y del labrador, de ahí que hoy se constituyen en una parte fundamental de la nacionalidad e idiosincrasia del costarricense, y en especial del campesino.
Seguidamente se presentan algunas palabras del vasto léxico del campesino costarricense con su respectiva definición conceptual y en algunos casos propios de la semántica rural, de esta manera tener claridad del lenguaje tradicional y popular. Se omite el origen etimológico de los vocablos.
Almácigo/ Almacigal: Práctica agrícola que se realiza para la germinación de semillas y el desarrollo de plántulas de hortalizas de importancia económica y comercial, para su posterior trasplante.
Apalear: Técnica agrícola que consiste en remover y levantar la tierra para amontonarla en torno a los troncos o los tallos de cualquier planta. Los campesinos generalmente usaban la pala ancha de hierro para esta actividad, de ahí el término.
Aporca/ Aporcar: Consiste en colocarle tierra a cada planta alrededor de la base o en el cuello de esta.
B
Bache: Término que identificaba a las viviendas para los trabajadores de las bananeras. Se llamaban así porque, en sus inicios, vivían en ellos varones solteros ( “bachelors”: soltero en inglés).
Bandolas del café: Nombre dado a cada una las ramas que soportan las hojas y las cerezas maduras o verdes del planta del café.
Beneficiado: Corresponde al proceso inmediato después de la cosecha de las cerezas de café en el que se limpia, despulpa y secan los granos de café. El proceso de beneficiado puede ser húmedo, utilizando agua para limpiar y despulpar el fruto, o seco, en el que el fruto se deja secar con la pulpa y luego esta se elimina mecánicamente.
Beneficio: Son las instalaciones donde se realizan los procesos de beneficiado y se almacenan los granos de café después de pelar, clasificar y empacar el café de pergamino a verde. Los beneficios que realizan procesos de limpieza con agua se llaman beneficios húmedos. En Costa Rica los beneficios que únicamente almacenan el café oro se conocen como beneficios secos.
Boletos: Medio para registrar las cajuelas de café recolectadas. El dueño de la finca emitía este tipo de moneda plástica o metálicas usada para contabilizar las cajuelas de café. Se entregaban al final de la jornada de trabajo, y los sábados el peón cambiaba los boletos por su equivalente en dinero.
Brete: Trabajo u ocupación.
Breva: Tabaco prensado en forma de tableta para ser masticado.
C
Cabinas: Establecimiento acondicionado para el alojamiento remunerado de corta estadía.
Café de sombra: Cafetales en los que se siembran otras plantas entre los cafetos que son más altas y producen sombra para los cafetos.
Canasto: Los recolectores o cogedores de café se amarran un cesto a la cintura para dejar caer los cerezos de café cuando los están arrancando de la bandola. Existen canasto de muchos tamaños, pero usualmente el recolector prefiere usar un canasto que equivalga a la medida de la cajuela. Los canastos solían ser fabricados con fibras naturales, pero hoy en día, por economía, se utilizan canastos plásticos, a pesar de que se rompen más fácilmente.
Cancha de futbol: Una plaza o una cancha es un espacio público urbano o rural, amplio y descubierto, en el cual se suelen realizar eventos deportivos.
Cajuela: Medida tradicional utilizada en Costa Rica para contabilizar la cereza de café recolectado. Medida de capacidad equivalente a 32 libras o 17 litros. La cajuela de café, en Costa Rica, corresponde a 1/20 parte de una fanega, es una unidad de medida tradicionalmente utilizada en la recolección de café. La cajuela se divide en 4 cuartillos. Cada cajuela de café pesa 12,9 kg o 28 libras de granos de café, por lo que una fanega pesa 258 kg y produce un saco de 46 kg de café oro.
Calle: Es la forma en que se plantan los cafetos en los cafetales, siguiendo líneas en las que los cafetos se plantan cercanos entre sí pero con mayor distanciamiento entre cada línea.
Caserío: Conjunto de viviendas casi siempre dispersas, especialmente en la zona rural, que tienen alguna proximidad y comparten un territorio
Chanchera: Construcción dedicada a la crianza y engorde de cerdos para la producción de carne porcina.
Comisaria/ Delegación/ Guardia rural/ Estación de policía: Edificio que sirve de sede a una representación policial del país (comisaría, delegación, guardia rural, entre otras).
Cooperativa cafetalera: Unión de cafetaleros para comercializar su producto en conjunto, con más volumen y mayor control sobre el mercado. Además, como toda cooperativa, una cooperativa cafetalera trabaja en mejorar la calidad de vida de sus asociados a través de negocios que les beneficien económicamente y programas que les beneficien socialmente.
Corral: En las casas o en el campo, sitio cerrado y descubierto que sirve habitualmente para guardar animales (RAE).
Corte: Secciones del cafetal que se asignan a los grupos de recolectores diariamente para que realicen la cosecha de las cerezas maduras. Usualmente se grita “Corte” en el cafetal cuando se está buscando a un grupo de recolectores que no se ve a simple vista, y el grupo de recolectores responde al grito para ser ubicados.
Cultivos: Áreas cubiertas en forma general de cultivos sean estos del tipo anual o permanente.
Cuartillo: Medida de capacidad que equivale a 4,25 litros.
E
Establo o caballeriza: Construcción permanente para el confinamiento de especies animales.
Era: Son terraplenes formados con tierra y canales construidos paralelamente, en hileras largas para sembrar en ellas los retoños o semillas. Pueden ser construidos en cuadros de madera para colocar los retoños para luego ser trasplantados.
Ermita: Originalmente era un lugar de oración y recogimiento que permitía a un fraile o ermitaño poder cultivar en paz su propia vocación particular.
F
Fanega de café: Medida que equivale a 400 libras, y a 24 cajuelas de café.
Finca agropecuaria: Propiedad inmueble en la cual se desarrollan actividades relacionadas con la agricultura y la ganadería (INEC).
G
Garabato: Herramienta tradicional que acompaña al machete del campesino para apartar la maleza en el proceso de desyerbe, generalmente está construida a partir de una rama fuerte en forma de gancho.
Granja: Construcción permanente para el confinamiento de aves como gallinas para la producción de huevos o carne para su consumo.
Granea: Periódo de alrededor de tres semanas previo recolecta plena del café, debido a que no se ha emparejado en su total maduración. Los cogedores deben pizcar los pocos granos maduros lo que implica una laboriosa tarea.
I
Iglesia: Edificación donde se desarrollan servicios religiosos públicos y se presentan imágenes o reliquias que son adoradas por los fieles.
J
Jornal/ Jornalear/ Fornalear: Se refiere a un día de trabajo de un peón en labores agrícolas. La tradición campesina indica que por lo general iniciaba su día de trabajo a las 6 am y terminaba a las 12 medio día. El pago se realizaba semanalmente.
L
Lechería: Construcción dedicada al ordeño y almacenamiento temporal de la leche.
Letrina: Servicio sanitario de hueco u hoyo seco, generalmente se ubicaba un espacio, fuera de una vivienda en un cubículo de madera destinado a defecar, y habitualmente no conectado a ninguna red de saneamiento.
Local comercial: Establecimientos dedicados a diferentes tipos de comercio, donde se venden productos varios, para su consumo inmediato dentro del inmueble o para el disfrute a domicilio.
Lomillo o camellón: es una técnica agrícola usada en la producción de hortalizas, consiste en el amontonamiento de tierra adobada en forma lineal. Consiste en la elaboración de montículos o hileras de tierra, separados entre sí, en función del hábito de crecimiento de las hortalizas, sembradas en ellas. Su construcción depende de la humedad del suelo, que varía según la época en que se siembre (seca o húmeda). El campesino una vez hecho los lomillos, cultiva en la parte superior, con ello atrapa la humedad del suelo y permite el drenaje.
M
Machete: Herramienta semejante al alfanje, de hoja medio combada, curvada y ancha, más angosta cera de la empuñadura; se usa para chapodar, escardar, segar y otras labores del campo.
Macana: Coa, palo largo con punta y un hierro en el extremo para abrir hoyos y otras labores.
Mandador o capataz: Persona encargada de un grupo de recolectores de café y quien es responsable de supervisar el trabajo que realizan los mismos en el corte de cada día. El mandador asigna las calles a cada recolector, y luego supervisa que los mismos no estén maltratando las plantas, botando mucho café al suelo o arrancando mucho café verde.
Manzana: Medida equivalente a 0,69 hectáreas, o sea 6.900 metros cuadrados. La manzana es una medida de superficie comúnmente utilizada en Costa Rica que se origina en España con el uso de las varas. Corresponde a 10 000 varas cuadradas que se traduce en casi 7000 m2, es decir poco más de 75000 pies cuadrados. Por su parte una hectárea equivale a 10 000 metros cuadrados.
Milpa: Es un agroecosistema mesoamericano cuyos principales componentes productivos son maíz, frijol y calabaza, complementados por el chile en algunas regiones. Este término se utiliza, en regiones fuera del ámbito mesoamericano, en los campos sembrados de maíz.
Moledero: Pieza de madera o tablón de madera rústica, normalmente sujeto a un lado de la cocina con tornillos o clavos. En este se prensaba la máquina de moler maíz y se preparaban diversos alimentos.
Muelle: Instalaciones debidamente acondicionadas para el atraco de barcos y otros tipos de embarcaciones acuáticas.
Ñ
Ñonga de café : Raíz y tallo de la planta del café. Generalmente es tronco grueso y leñoso que con el paso de los años cuando se renuevan los cafetos, es apreciado para cocinar como leños.
P
Palea o “volar pala”: Actividad que realizaba el campesino consistente en limpiar los terrenos de malas hierbas. Se utiliza la pala de hierro para voltear la tierra que se deposita en torno a los surcos de los cultivos a manera de abono y limpieza de las huertas.
Parque: Terreno situado en el interior de una población que se destina a prados, jardines y arbolado sirviendo como lugar de esparcimiento y recreación de los ciudadanos.
Parroquia: Templo donde se brinda atención espiritual a los creyentes y se ejerce la administración de los sacramentos.
Planta procesadora / empacadora: Instalaciones dedicadas a procesar o empacar productos como arroz y otros granos básicos, frutales, legumbres, hortalizas y otros productos vegetales y de origen animal.
Pintas: Tradición oral campesina de predecir el clima en el transcurso del año. En los primeros doce días de enero, el campesino observa los cambios de clima, así pronosticaban mensualmente los cambios del clima anual. Usado para determinar los tiempos de cosecha y siembra. Y del día 13 de enero al 18 de enero, el campesino determinaba para confirmar los días anteriores.
Pinto: hace referencia al gallo pinto, platillo hecho a base de arroz y frijoles guisados que se consumen tradicionalmente a la hora del desayuno en Costa Rica.
Pulpería: Tienda donde se venden artículos de uso cotidiano, principalmente comestibles (RAE). Una pulpería era, hasta inicios del siglo XX, el establecimiento comercial típico de las distintas regiones de Hispanoamérica, encontrándose ampliamente extendida desde Centroamérica hasta los países del Cono Sur. Su origen data de mediados del siglo XVI y proveía todo lo que entonces era indispensable para la vida cotidiana: comida, bebidas, velas, carbón, remedios y telas, entre otros.
R
Racimo de banano: Equivale a 36 kilos del fruto de la planta del mismo nombre. Conjunto de frutas sostenidas por un eje común
Recibidor de Café: Estaciones ubicadas cerca de caminos vecinales donde se almacena el café para luego ser llevado al beneficio para ser procesado (SNIT). Son estructuras donde los caficultores llevan la cosecha diaria para ser medida en fanegas y entregada al beneficio o al comprador. El recibidor puede estar ubicado junto a un beneficio o puede ser una estructura independiente colocada cerca de grandes grupos de cafetales alejados del beneficio, lo que implica que después de medidas las fanegas, esta cosecha se debe transportar hasta el beneficio.
Redondel: Construcción circular rústico que sirve para los espectáculos taurinos.
S
Salón comunal: Edificio dedicado a actividades comunales diversas (fiestas, reuniones, charlas y otras).
Solar: Terreno que hay cerca de una casa de campo , donde se cultivan plátanos, cafetos, chayoteras, algún árbol frutal, etc. Equivale a una carta parte de manzana de terreno. Alrededor de 1725 metros cuadrados.
T
Tajo: Un tajo es una explotación generalmente a cielo abierto, en la que se obtienen rocas industriales u ornamentales.
Trinchante: Trastero o mueble de madera rústico para guardar trastes y enseres de cocina.
Troja: Especie de Bodega o edificio para el almacenamiento temporal de bienes (productos agrícolas, madera, herramientas, etc.).
V
Villa: Grupo de viviendas construidas con una idea planificada y urbanística de conjunto, donde la densidad de viviendas suele ser menor y con un fin de residencia estacional.
Vivero: Es un lugar cerrado con una cubierta traslúcida de vidrio, sarán o plástico que permite el control de la temperatura, la humedad, etc., y que se dedica a la producción de cultivos.
Fuentes consultadas:
-Agüero Chávez, A. ( 1996) Diccionario de Costarriqueñismos. 1. Ed. San José, Costa Rica, Asamblea Legislativa.
-Jara Murillo, C. ( 2006) El español de Costa Rica según los ticos: un estudio de lingüística popular. San José, Costa Rica, 1 ed. Editorial UCR.
-Sánchez Corrales, V. ( 1988) Lexicografía del Español en Costa Rica, visión crítica. En: Filología y Lingüística, (XIV, ( 2): 147-156.
- Sánchez Lobato, J. (1994) El español en América. Universidad Complutense de Madrid, España. Centro Virtual Cervantes.
https:// Dialnet-ElEspanolEnAmerica-2871925%20(4).pdf
-Universidad de Costa Rica ( s.f.) Español de Costa Rica. Instituto de investigaciones Lingüísticas. https://inil.ucr.ac.cr/linguistica/espanol-de-costa-rica/
*M.Sc. M.Sc. Alberto E. Rojas Vásquez. Profesor e investigador de la Cátedra de Historia de la UNED. Correo electrónico: